Escudo de los Larripa |
En el Valle de Echo han nacido, a lo largo de los siglos, diversos personajes que alcanzaron fama y renombre como teólogos, juristas, o militares.
Entre
estos últimos, el de mayor renombre fue D. Domingo Larripa, o De La Ripa.
Nacido
en Echo en 1750, de origen infanzón, fueron sus padres Domingo Larripa (o La
Ripa, de ambas formas aparece el apellido en distintos documentos) y Maria
Agustina Laplaza, siendo sus tíos los famosos juristas Juan Francisco Larripa y
Marraco y Francisco Javier Larripa y Aznárez, y otro de sus antepasados el
famoso Fray Domingo Larripa, que fue monje benedictino en San Juan de la Peña,
Cronista del Reino de Aragón, y autor de dos obras históricas de renombre.
Soldado de los Voluntarios de Aragón y Granaderos del Rgt Extremadura |
Domingo
De La Ripa, ingresó en los Reales Ejércitos en enero de 1768, en el Primer
Batallón de Voluntarios Distinguidos de Aragón. Participó en la expedición de
Argel, y pasó muchos años sirviendo en las Américas. A su regreso, defendió la
ciudad de Ceuta, y posteriormente en la Península, participó en la Guerra
contra la Convención Francesa. Precisamente, en 1793, sirvió muy cerca de su
localidad natal, defendiendo los puertos de Aragüés y Jasa. Fue nombrado
capitán de granaderos, en septiembre de 1794.
Firmada
la paz con Francia, participó en numerosas acciones en guerra contra
Inglaterra. Nombrado Teniente Coronel, sirvió en el Regimiento Extremadura de
Infantería de Línea.
Defensa de la Puerta del Carmen |
Desde
Cataluña, llevó a su batallón del Regimiento de Extremadura hasta la ciudad de
Zaragoza, participando durante el Primer Sitio en el verano de 1808. Encargada
la defensa de la mítica Puerta del Carmen, soportó los duros asaltos del 2 de
julio, resultando herido de un balazo. Palafox le ascendió a Coronel.
Reducto del Pilar |
Durante
el Segundo Sitio, en el invierno de 1808-1809, fue el comandante del llamado
Reducto del Pilar ( un promontorio rocoso que se fortificó y artilló, que
estaba situado extramuros de la ciudad, más o menos a la altura de la actual
Plaza de Sasera, en el Paseo de Sagasta). Este reducto, estaba considerado el
puesto más peligroso y quedó arrasado por la artillería francesa el 15 de
enero.
Domingo De La Ripa, salió ileso
del reducto, fue ascendido a Brigadier y aún mantuvo el mando de
nuevo sobre la
defensa de la Puerta del Carmen. El 20 de febrero resultó de nuevo herido en
los combates últimos del Sitio, ya que al día siguiente capitulaba la ciudad.
Se pierde su rastro a partir de ésa fecha, pero al parecer, fue en esos días
siguientes a la capitulación, cuando falleció a resultas de sus heridas o por
la epidemia de tifus que asolaba la ciudad, en casa de su tía Dª Clara Andreu Heredia, viuda de su tío Francisco de la Ripa.
Sobre su muerte, ver ésta entrada posterior con nuevos datos:
https://echosinhache.blogspot.com/2016/08/las-dos-muertes-del-coronel-cheso.html
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