El pasado viernes 9 de marzo, subía al blog un documento facilitado por mi amigo Javier Regla, en que se daba cuenta del desahucio y subasta el 16 de octubre de 1697,de unas casas en Echo, propiedad de Francisco Gallar, por supuesta deuda con el Arrendador del tabaco de la Diputación del Reino de Aragón. En el documento se citaba un acta de execucion anterior, del 24 de agosto de dicho año, de la que lamentablemente no disponíamos, por lo que sólo podíamos especular con el motivo del desahucio y subasta, que parecía deberse a deudas contraídas con la venta del tabaco.
Sin embargo, Javier Regla me ha proporcionado posteriormente dicha acta (más bien dos) encontradas igualmente en el Archivo Histórico Provincial de Huesca, dando su contenido un giro total a la historia, por cuanto aun siendo lamentable en cualquier caso el desahucio de su casa de cualquier persona, los motivos no eran por deuda, sino relacionados con el contrabando, y de una forma muy peculiar.
Antes de proseguir la lectura, estaría bien recordar la entrada anterior citada, fundamentalmente por la información relacionada con las instituciones aragonesas (pulsar aquí para acceder a la entrada del día 9 de marzo)
En la primer acta del día 24 de agosto de 1697 se da cuenta de que ante la presencia de Joseph Mange, lugarteniente de
Justicia y juez ordinario de la villa y valle de Hecho, presente el notario y
testigos infrascriptos Parecio personalmente Joseph Antonio Laborda, infanzón,
Portero de los Ilustrissimos señores Diputados del presente Reyno de Aragon,
residente en la ciudad de Çaragoça y como tal con el poder y facultad que tiene
del consistorio
Alega que ...en
dias pasados en los terminos de dicha valle de Hecho, Francisco Gallar y uno
llamado Silbestro residentes en dicha villa como Guardas que dijeron ser del
Arrendador del Tabaco vieron y coxieron a Juan Vico vecino de la villa de Borau
y a uno llamado el catalan que ignora el nombre y el lugar donde es /sin
embargo de aver dilingencias para saber el nombre, apellido y lugar donde vive/
que conducian y llebaban en dos rocines quatro arobas y onze libras de tabaco
sin ser del estanco y consumo de dicho Reyno, por cuya causa se les quito dicho
tabaco y rocines y estaban en pena de
cuatrocientas sessenta y cinco libras de moneda jaquessa que importa dicha
pena, a sessenta y quatro sueldos jaquesses cada libra.
Agentes del resguardo. Goya |
Deducimos de lo relatado, que Francisco Gallar y el tal Silbestro actuaban como "Agentes del Resguardo"(El Resguardo del tabaco -hoy Servicio de Vigilancia Aduanera- era una organización paramilitar encargada de combatir el
contrabando de este artículo monopolizado . No se sabe con
certeza si lo creó Felipe V o Carlos III. Desapareció
cuando se extinguió el estanco del tabaco en virtud de Decreto
de las Cortes de Cádiz de 9 de noviembre de 1820. Fuente: Alfonso Pozo Ruiz. Universidad de Sevilla)
Uno de los documentos citados |
El justicia de la Villa de Hecho, pasó pues a condenar a los contrabandistas a dicha pena pecuniaria por haber sido el delito en el término de la Villa, lo que aceptó el Portero de los Diputados del Reino, Joseph Antonio Laborda como superior autoridad. El notario transcribe los hechos en el acta, y firman como testigos Marco Navarro y Pedro López, labradores y vecinos de Hecho.
Pero no acabó aquí la cosa. Y seguimos leyendo la segunda acta de dicho día, donde se resuelve el misterio de la causa del desahucio de Francisco Gallar. Comienza describiendo dónde estaban situadas las casas en Hecho:
Eadem
die et loco entro las cassas de Francisco Gallat tecedor de lienzos residente
en dicha villa, la qual dicha cassa esta sitiada en dicha villa en el Barrio de
Palacio que confrenta con cerrado de Miguel Ximenez, con patio de Thomas Fonz y
via publica estando en dichas cassas el señor Joseph Mange Justicia y juez
ordinario de la villa y valle de Hecho, presentes el Notario y testigos
infrascriptos
Parecio
personalmente Joseph Antonio Laborda, infanzon, Portero de los Ilustrisimos
Señores Diputados del presente Reyno de Aragon el qual pregunto en dichas cassa
por la persona del dicho Francisco Gallat a su madre y muger respective
y
aviendo respondido estas que no estaba en dicha villa dijo le queria para que rebelara, dijera e hiciera relacion
donde estaban dos rocines que en dias pasados avia quitado y ocupado a Juan
Vico, vecino de la villa Borau y a un catalan compañero suyo en los terminos de
dicha valle de Hecho, por estar cargados dichos rocines con quatro arrobas y
onze libras de tabaco sin ser este del estanco de dicho reyno, los
quales rocines el dicho Francisco Gallat los llebo y tubo en las cassas de su
propia havitacion.
El agente perseguidor de los contrabandistas, se había quedado con los dos rocines incautados y no los había entregado a la justicia, por lo que él mismo se veía así perseguido por la apropiación.
y
por no averlos rebelado desde le coxieron asta ahora de presente a dichos
señores Diputados como Jueces de dicha pena ni saber que se han hecho, dijo
dicho Portero que en resistencia de no averlos entregado entro el tiempo a
dichos Ilustrisimos Señores Diputados, siquiere a su arrendador del efecto del
tabaco, pasaba como en efecto paso en nombre del consistorio y con el poder y
facultad que para ello tenia de dichos Señores Diputados, a Inventariar
siquiere executar privilegiadamente los bienes muebles de dicho Francisco
Gallat.
y
por no aver allado bienes muebles bastantes y del balor de dichos rocines, dijo
en presencia de dicho señor Justicia, de mi el Notario y testigos infrascriptos
que en defecto de dichos bienes muebles
passaba a executar como con efecto executo las sobredichas cassas arriba confrontadas, las quales assi
executadas dijo las encomendaba y
encomendo a dicho señor Justicia para que
en nombre del Reyno cuidara de ellas asta que dichos Señores Diputados
dispusieran de ellas.
Caros le salieron los rocines al pobre Francisco Gallar o Gallat, pues como vimos anteriormente, en octubre del mismo año volvió la justicia a Hecho y su mujer y su madre fueron desahuciadas (él seguía sin dar señales en toda ésta historia) y sus casas subastadas pues no tenía suficientes bienes muebles para pagar la sanción.
El tabaco era monopolio real desde el siglo XVI, y aportaba a la Hacienda pingües beneficios pues su precio era muy elevado , por lo que proliferaban las cuadrillas de contrabandistas que como en éste caso lo pasaban en dirección a Francia, lo que hacía que estuviera en peligro uno de los ingresos más sustanciosos de la Corona. Las leyes para combatirlos y la acción represiva eran enérgicas y sin contemplaciones. Vamos, como hasta ahora...
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