AÑO 1893. UN CHESO EN LA COMISIÓN MADRILEÑA CONTRA EL DERRIBO DE LA TORRE NUEVA DE ZARAGOZA

 

Torre Nueva de Zaragoza

Entre el verano de 1892 y el de 1893, la Torre Nueva, uno de los mayores monumentos mudéjares de la ciudad de Zaragoza y de España, fue derribada por decisión de los caciquiles e ignorantes miembros de la corporación zaragozana de aquella época , por un pretendido peligro de desmoronamiento.  No obstante, siempre ha circulado en la ciudad que el verdadero motivo fueron las presiones de algunos influyentes comerciantes (especialmente el comercio de paños Fortea) por las dificultades de acceso a sus negocios que originaba la situación de la torre y  otras razones como... "que su sombra les molestaba para lucir sus lindas fachadas y alzar el precio de los alquileres" 

La Torre Nueva, de 80 metros de altura y 11,5 de diámetro, se había construido entre los años 1504 y 1512 en la Plaza de San Felipe, por orden del Concejo de la ciudad para albergar un reloj público, así como las campanas (colocadas en 1508) para que regularan la vida de la ciudad. Estas mismas campanas cumplieron con la misión de avisar a la población durante los Sitios de 1808-1809 sobre la trayectoria de las bombas que lanzaban los franceses.

Al poco tiempo de su construcción la torre sufrió una inclinación, probablemente por las prisas en construir los cimientos y el primer cuerpo. La inclinación llegó a ser de tres metros y se mantuvo así hasta su demolición casi cuatrocientos años después. Durante esos siglos, fue el símbolo de la ciudad. 

La Torre Nueva. A la derecha el torreón Fortea y al fondo la torre de San Pablo

Tras decidir su derribo, hubo un movimiento contrario al mismo entre parte de la población y numerosos intelectuales. En Zaragoza, frente a los partidarios del derribo, encabezados por Luis Franco y López, barón de Mora, se creó tras sesión pública en el Teatro Goya . la Junta de Defensa de la Torre Nueva, presidida por Simón Sainz de Varanda y como secretario Anselmo Gascón de Gotor.

Anselmo y Pedro Gascón de Gotor

Encabezaban la oposición al "turricidio", los hermanos Anselmo y Pedro Gascón de Gotor , miembros de la burguesía local zaragozana. Anselmo fue pintor, escritor, investigador y  profesor . Pedro era sacerdote, escritor, arqueólogo e historiador del arte. Entre ambos hermanos editaron en 1893 la publicación "Semanario Ilustrado"  que pasó a llamarse "La España Ilustrada"  editada hasta 1896 y que se convirtió en la publicación que con más firmeza se opuso a la demolición de la Torre consiguiendo que el asunto se convirtiera en un caso de interés nacional.

La España Ilustrada. Número especial sobre el derribo de la Torre 

En Madrid, se constituyó una "Subcomisión de Defensa de la Torre Nueva", y en ella participaba, según la publicación La España Ilustrada, Gregorio Rodríguez Orensanz, nacido en Echo en 1868 y que estudiaba leyes en la Universidad Central de Madrid (actualmente Universidad Complutense). En el ejemplar del 30 de abril de 1893, se recogen numerosos testimonios y escritos contrarios al derribo de la Torre , entre los que figuran los de un gran número de directores de periódicos e intelectuales de todo el país. Los de Gregorio Rodríguez Orensanz también: 

   "Arrogante originalidad, arte arquitectónico de gran pureza, recuerdos gloriosos del pasado. Nada ha respetado la piqueta demoledora dirigida por egoísmos ocultos, amparados por gentes advenedizas.

   Se han desoído las razones que en pro de tu conservación formularan patriotas y entusiastas aragoneses; sus lamentaciones y quejas, han sido contestadas con el "Crucifije" del más fuerte y codicioso en cierto género de luchas.

¡Adiós Torre Nueva!¡ Ya no serás admiración de propios y extraños por tu artística forma! Tu destrucción en este momento de la historia, demuestra el predominio de los intereses bastardos de los menos, sobre el patriotismo, razón y cariño de los más.

   Tu derribo, no hará olvidar al aragonés castizo, que orgullosa y altanera, envuelta en nubes de humo de los cañones del sitiador extranjero, fuiste constante vigía de los defensores de la Independencia Patria."

Tras éste escrito firmado como G. Orensanz, Individuo de la subcomisión de defensa de la Torre Nueva en Madrid  , la revista reproduce otro que firma como Gregorio Rodríguez Orensanz:

,,," Aun en la ruina eres grande, Torre Nueva.

   Sobre tu alta cúspide ondeó por muchos siglos la augusta enseña de un valiente pueblo. Símbolo fuiste de la gloria inmarcesible del pueblo aragonés. Tu fuiste la primera en ver humillada a tus pies la dura cerviz del gran coloso del siglo.

   Ya no se oirá jamás la metálica voz de tu campana anunciando a Zaragoza todas las horas del tiempo. Tu extraordinaria inclinación asusta a cuantos admirados te contemplan. Esta es tu sentencia de muerte. Ya no te queda otra cosa que la tumba del olvido". 

Solicitud de inscripción en el Colegio de Abogados de Gregorio R. Orensanz

Gregorio Rodríguez Orensanz, terminados sus estudios se colegió en el Ilustre Colegio de Abogados de Madrid el 4 de marzo de 1899 y residía en el 39-40 de la calle Tudescos , bocacalle de la Gran Vía. En 1901 aparece como uno de los electores con derecho a voto en las elecciones municipales de Madrid. Y en1907 dando una conferencia en el Centro Aragonés de Madrid, tal como publica el 25 de marzo el diario de la tarde La Prensa:

Centro Aragonés

   El sábado dió su anunciada conferencia el señor, D. Gregorio Rodríguez Orensanz sobre el tema "El Justicia Mayor de Aragón", haciendo historia muy detallada e interesante sobre el origen de aquella veneranda institución, su manera de funcionar y su terminación con la muerte de Lanuza.

   El Sr. Orensanz demostró gran conocimiento del asunto, y fué muy aplaudido por la concurrencia.

En 1910 , Gregorio Rodríguez Orensanz es elegido secretario primero de ése mismo Centro Aragonés, cuyos presidentes honorarios eran Basilio Paraíso y el sabio Santiago Ramón y Cajal. En 1925 aparece como miembro de la comisión de expertos creada para tratar sobre los Foros y asesorar al gobierno sobre dicho tema. Desconocía la fecha de su fallecimiento hasta que mi amiga de Echo, Encarna Lagrava, me informa de que falleció el 31 de Julio de 1944 y está enterrado en el cementerio en su pueblo natal, Echo, como se puede comprobar por la fotografía de su tumba que me envía Encarna. 

Algunos amigos de Echo me comentan también que el banco de piedra o cemento que durante años estuvo situado donde hoy se alza el cuartel de la Guardia Civil de la localidad, estaba dedicado a éste personaje, que habría nacido en Casa Don Gregorio, actualmente denominada Casa Sebastián en la plaza Conde Xiquena. 

Al fondo a la izquierda encalada en blanco, Casa Sebastián antigua Casa Don Gregorio

En cuanto a la Torre Nueva, es sabido que las presiones ejercidas, las reclamaciones y denuncias no sirvieron de nada y que se derribó, vendiéndose cada ladrillo. Las campanas fueron a parar  a las nuevas torres del Pilar, el reloj que inicialmente se colocó en la iglesia de San Felipe sufrió un desprendimiento de una de sus placas y hoy se custodia en los bajos de Casa Montal formando parte de un pequeño museo que el establecimiento ha dedicado a la Torre Nueva. Tras más de 130 años desde su desaparición, todavía hoy es añorada y en estos años ha habido casi una decena de intentos y propuestas de reconstrucción. La última se ha hecho pública hoy mismo con la iniciativa de Emilio Parra que ha constituido una Fundación para promoverla. Las cacicadas contra el patrimonio han continuado durante años en nuestra ciudad. La piqueta al servicio de los intereses inmobiliarios ha sido el elemento más dañino que las guerras y los desastres naturales. Y no parece que se vaya a cambiar....Qué pena!

Demolición de la Torre Nueva