Desde este blog se pretende difundir la historia, el arte, la cultura y la naturaleza de la villa y del valle de Echo, uno de los enclaves pirenaicos de Aragón, más hermosos y dinámicos. Su pasado, presente y futuro merecen la pena conocerse y compartirse. Con mi admiración , cariño y la mayor modestia.

sábado, 6 de julio de 2024

EL LABERINTO DE LA IGLESIA DE SAN PEDRO DE SIRESA

Interior de San Pedro de Siresa. En primer lugar el laberinto de cantos rodados

 

La figura geométrica del laberinto, es un símbolo que se conoce desde hace al menos  3.500 años, de ignorado origen, que aparece en distintas culturas y distintos puntos en todo el mundo y que ha sido incorporado para varios propósitos en cada una de dichas culturas, a menudo como protección de casas y ciudades contra influencias malignas. Aparecen en Perú, en la India, en el Antiguo Egipto... Pero para nuestra cultura europea, el arquetipo de laberinto es el de Creta, el de la mitológica historia de Teseo y el Minotauro Asterio, construido por Dédalo para albergar (y esconder) a éste.

Laberinto de Chartres

Dentro de la arquitectura sagrada, el laberinto en el suelo de la nave se incorporó en la construcción de las grandes catedrales góticas y si bien su uso estuvo  generalizado en bastantes países, hoy son pocas las catedrales en las que se han mantenido: en Inglaterra, Alemania , Italia y especialmente Francia que dispone de seis catedrales en las que se encuentran laberintos, entre las que destaca el más conocido de la catedral de Chartres.

A partir del siglo XIII, el laberinto en las catedrales tiene un simbolismo positivo, como la senda del peregrino que realizaba el viaje a Jerusalén, uno de los destinos junto con Roma y Santiago de Compostela, del peregrinaje cristiano medieval. Su recorrido, normalmente de rodillas, sustituía a dicho viaje a Tierra Santa y alcanzaba muchas indulgencias. Fue especialmente utilizado como sustituto de la peregrinación tras la caída y pérdida de la ciudad sagrada de Jerusalén en el año 1187.También se recorría como penitencia.



Los laberintos de las catedrales normalmente eran del tipo clásico o univiario , una espiral de una única dirección, construido normalmente en mármol aunque los hubo del tipo laberinto de mazes, con caminos alternativos. 

En España, no hay ninguna catedral en la que se haya conservado el laberinto y solamente unas pocas iglesias cuentan con él en su suelo, normalmente del País Vasco, pero la fecha de su construcción es posterior al período gótico y datan del siglo XVII  o siguientes.

La iglesia de San Pedro de Siresa tiene un laberinto de cantos rodados en el suelo de su nave. La iglesia es sin ninguna duda la joya patrimonial del valle de Echo y una de las más importantes de Aragón. En origen carolingia construida en el siglo IX como elemento principal de un monasterio, según las excavaciones arqueológicas realizadas con motivo de la intervención que se realizó en el año 1991, hubo otra iglesia anterior visigótica, cuyos restos aparecieron en dichas excavaciones. Almanzor destruyó el monasterio y la iglesia en el año 999 y tras reconstruirla, fueron numerosas las intervenciones posteriores realizadas a lo largo de los siglos para su conservación, de las que las más importantes, hasta nuestra época, fueron la de 1082 del rey Sancho Ramírez o la del obispo Vidal de Cañellas en el siglo XIII.

Iglesia de San Pedro de Siresa


De ésa fecha, es originalmente el laberinto, único en su género que a pesar de sus mutilaciones se mantiene en el suelo de la nave de la Iglesia de San Pedro. No obstante, resulta sorprendente la poca información y estudio que sobre él existe. Ni Ricardo del Arco en su documentado trabajo del año 1919 sobre el Real Monasterio de San Pedro de Siresa, ni Antonio Durán en sus numerosos escritos sobre el mismo e incluso el informe de la excavación citada realizada por el arqueólogo Rafael Puertas Tricas, menciona ni una sola cita sobre dicho laberinto. Sólo el profesor titular de Historia del Arte de la Universidad de Zaragoza , Juan Francisco Esteban Lorente, en un artículo publicado en la revista Artigrama de 1994-1995 hace referencia al mismo. Seguiremos dicho escrito para su descripción:

 ...Para realizar aquellas excavaciones se desmontó totalmente el antiguo pavimento, las piedras de cantos rodados se amontonaron en un rincón y en 1995 el arquitecto Antonio Alcubierre mandó rehacer el pavimento con la aproximación que le permitían sus notas y fotografías; el resultado fue totalmente erróneo. En los primeros días de julio de 1995 el Director General de Patrimonio , entonces don Manuel García Guatas mandó rectificar esa zona de pavimento para aproximarlo al dibujo primitivo del laberinto. El gobierno cambió y se hizo un simulacro de rectificación. 

El antiguo pavimento de San Pedro de Siresa era un laberinto circular que con toda probabilidad era del siglo XIII y además es único conocido de su tipo.

Estaba situado en el tramo de la nave contiguo al crucero (en el mismo sitio en el que hoy se encuentra su errónea impronta).

El laberinto visto desde la tribuna



De este laberinto tomamos un apunte en la primera semana de agosto de 1981, en compañía de nuestros compañeros Manuel García Guatas, Fernando Galtier Martí y Mª Adelaida Allo Manero, apunte que confirmamos en julio de 1991 en compañía del citado Manuel García Guatas.

Se trataba de una espiral que aparentaba 12 círculos. Las losas de piedra colocadas a finales del siglo XVI lo habían cercenado en los dos laterales de modo que cortaban longitudinalmente cuatro círculos a cada lado. Las vías de este laberinto estaban construidas con alargados cantos rodados colocados en espiga. 

El laberinto de Siresa era de tipo circular, de los llamados cretenses, pero con tres riñones y dos cortes en el radio, éste mirando hacia el altar mayor. El centro y el riñón interior tenía trazado curvo mientras que los dos riñones exteriores tenían las terminaciones rectas. El último aro tenía una corrección y la entrada redondeada para disimular al espiral.

Dibujo del laberinto de Siresa por Esteban Lorente.


Tras hacer alusión a los distintos tipos de laberintos, Esteban Lorente sigue:

...La peculiaridad del laberinto de Siresa radicaba en tener tres riñones y en ser de perfil recto las terminaciones de los dos exteriores. El riñón interior y el centro era de diseño curvo y de similares proporciones (no tamaño) a todos los laberintos de tipo cretense, incluso los representados en la artesanía popular del siglo XVIII de países nórdicos, lo cual ratificaba una tradición y metodología de diseño olvidada para nosotros.

Es el único laberinto conocido de tipo cretense con tres riñones y dos cortes en el radio.(Destacado en negrita en el original)

Su situación en el centro del cuerpo de la iglesia lo pone en contacto con los laberintos de las catedrales francesas, realizados en su mayoría en el siglo XIII, pero de diseño erudito. Así es el del pavimento de Chartres, y lo fueron los desaparecidos de Reims, Amiens, Arrás, Sens y Auxerre, etc.

....El laberinto de Siresa pudo ser hecho a finales del siglo XIII, cuando se emprenden unas obras de acondicionamiento en la iglesia, acondicionamiento que vendría a completar el grupo del Descendimiento del que formaba parte el Cristo que se encontró en julio de 1995.

A finales del siglo XVI y principios del siglo XVII así como en el XVIII (segunda mitad) hubo también obras de acondicionamiento de la iglesia pero se respetó la mayor parte del laberinto.

Y concluye Esteban Lorente:

En Siresa teníamos un ejemplo único (de lo publicado y conocido hasta la fecha), al parecer del siglo XIII, sin duda de una tradición pastoril pero mejorado por la cultura religiosa del monasterio. Hoy tenemos una errónea figura moderna a la que ya le han sacado significados (= el báculo de San Pedro rodeado de los aros de la santidad).

Entrada principal y pavimento en 1984



Pero no es lo único que se perdió o modificó en aquella intervención. José Luis Ubeira Hernández en su libro Siresa , el lugar, la historia, la leyenda publicado en 1999 por el Instituto de Estudios Altoaragoneses además de hacer alusión al laberinto y citar en su bibliografía el artículo de Esteban Lorente, menciona:

...El piso estuvo alfombrado por un laberinto circular de los llamados de tipo cretense datado en el siglo XIII, único conocido de su tipo, que fue cercenado a finales del XVI al colocarse en los laterales losas de piedra. Tras la última restauración se ha vuelto a disminuir, sobre todo en la base, donde al pie de los siete escalones que daban acceso al interior por la puerta principal, el mosaico dibujaba una estrella de David, asimétrica con respecto al altar mayor y más bien orientada hacia el crucero norte.

En la mencionada intervención, apareció el ya famoso Cristo de Siresa y el levantamiento del cimborrio produjo una acalorada discusión entre los distintos expertos y estudiosos. Ambos hechos hicieron que la nueva mutilación del laberinto del pavimento pasara tan desapercibida como su existencia lo había hecho hasta entonces a esos mismo expertos y eruditos y a los que les precedieron. Confiemos en que no se produzcan más intervenciones tan selectivas y que le demos al laberinto de la iglesia de San Pedro ( a lo que queda de él), la importancia que debería de tener. 

El Cristo del siglo XIII encontrado en la intervención citada





6 comentarios:

  1. Una pena, el original yera espectacular, lo desarmaron en teoría numerando y clasificando las piedras y luego las montaron como les parecio

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  2. Thanks for explaining the labyrinth, interesting. Liked the posting today am always learning when I visit your blog.

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  3. Muchas gracias por tu interesante artículo. Me encanta la fotografía en la que aparece el Cristo.

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