Desde este blog se pretende difundir la historia, el arte, la cultura y la naturaleza de la villa y del valle de Echo, uno de los enclaves pirenaicos de Aragón, más hermosos y dinámicos. Su pasado, presente y futuro merecen la pena conocerse y compartirse. Con mi admiración , cariño y la mayor modestia.

sábado, 21 de enero de 2023

RELATO DE UNA MONTERÍA EN EL VALLE DE ECHO EN EL AÑO 1905

 


No es la primera vez que traigo al muro el relato de una montería en el Valle de Echo. Además de la interesante crónica en tres capítulos de la cacería organizada por un grupo de franceses en 1869 que reseñé en el blog en octubre de 2021, el 28 de noviembre de 2018 di cuenta de otra expedición de caza realizada en 1906 por un grupo de cazadores zaragozanos , oscenses y jacetanos auxiliados siempre por chesos (que eran los que hacían todo el trabajo y que de no ser por ellos a menudo sólo hubieran cazado algún catarro) (ver enlace: https://echosinhache.blogspot.com/2018/11/cronica-de-una-caceria-en-el-valle-de_28.html )

En ésta ocasión, el grupo de cazadores que se aventura en el Valle de Echo lo hacen un año antes, en enero de 1905 y está compuesto en gran parte por varios de los participantes en la cacería de la crónica de 1906. El relato se publica el 11 de enero de 1905 en las páginas 1 y 2 del HERALDO DE ARAGÓN, y dice así: 

UNA MONTERÍA

Diario de un cazador

No hace muchos días que publicábamos la noticia de haber partido de esta ciudad unos cuantos amables y esforzados señores, que iban de cacería a la alta montaña, donde los jabalíes convidan este años a las peripecias y emociones cinegéticas.

Ofrecimos dar cuenta diaria a los lectores de aquella animadísima y arriesgada expedición; pero el correo, cuya imagen simboliza el Estado con dos alas, no ha instalado estafetas en la agreste soledad de los montes.

La incomunicación en que han vivido los expedicionarios, hizo imposible llegara a nuestro poder por partes la crónica, hasta hoy que a mano nos trae uno de los excursionistas el siguiente diario reproductivo de las interesantes incidencias ocurridas a nuestros afables amigos, los cazadores de jabalíes.

5 de enero.- Son las ocho de la noche y acabamos de llegar a Hecho después de un día magnífico y espléndido, empleado en viaje, que nada ha tenido de molesto.

En Huesca salieron a saludarnos los amigos García y Begnard, que sintieron mucho no acompañarnos en esta jira.

Al llegar a Hecho, nos esperaban Echeto, Borao, Brun, Mariané y otros buenos amigos; y todos juntos hicimos los honores a una suculenta y abundante cena.

La animación entre los excursionistas es extraordinaria. Nos dicen que hay cantidad incontable de jabalíes; hoy mismo, hace un momento, han visto un jabalí colosal, enorme, en mitad de un camino de paso frecuente.



El osado, desafiando, altivo, separóse del resto de la manada, ocupando el lugar de tránsito obligado para las gentes. Esta demostración de la abundancia de jabalíes produce exclamaciones de júbilo. 

A pedrada limpia han tenido que desviar a algunos, los caminantes.

Está todo preparado a maravilla; ni el más nimia detalle ha caído en olvido . Formamos la partida 30 individuos que mañana registraremos hasta el último rincón de "La Pardina" lugar ideal para la caza a que nos dedicamos. 

El tiempo está espléndido. Ha nevado muy poco.



Día 6.- Los Santos Reyes nos han traído un sueño pegajoso, indesprendible y un apetito voraz, implacable, natural consecuencia de los esfuerzos de las caminatas y del cambio de ambiente.

Son las siete de la mañana. Mientras los compañeros se colocan en los puestos, enristro el lápiz para escribirles estas cuartillas que llevarán los mozos que se disponen a ir al pueblo en busca de los impermeables que dejamos olvidados.

Claro es, como les escribo al comenzar la jornada, no esperen en la crónica de hoy noticias sensacionales. Mañana será otro día.

Día 7.- Apenas hay nieve. No obstante sobre la tierra semiblanquecina se observan rastros frescos de jabalíes. Los prácticos aseguran que se trata de una manada de 16 ejemplares. Ellos mismos nos dicen que la pondrán a tiro en el primer resaque. 

Nuestro compañero el intrépido montañés Sr. Bielsa ha dado esta mañana pruebas de su agilidad y destreza trepando a una considerable altura, casi inaccesible por lo escarpada.

En la ascensión cobró una hermosa grulla (pobre). Antes de colocarnos en los puestos dimos caza también a una preciosa canal (así la llaman en el país) pequeño cuadrúpedo que tiene gran semejanza con la especie cabría. 


Grulla

Somos unos estratégicos de primer orden. Nos hemos desplegado en un prolongado barranco, al que afluyen muchos pasos transitados con frecuencia por los xabalins.

El intrépido Mariané dirige a los punteros.

El tiempo presenta tendencias a meterse en nieves; cosa que sería convenientísima, para poder coger rastros más seguros. Comenzamos el resaque. Será un resaque provechoso. Mañana lo verán.

Día 8.- El ojeo de ayer no nos dió mucho resultado, pero en cambio nos llenó de esperanzas.

Hoy madrugamos poco porque anoche dimos amplia libertad a los resacadores en pago a su ímprobo trabajo.

Son unos excelentes muchachos. Dieron al traste con un hermoso voto (sic)(boto) de vino, que se vació entre algazaras, interrumpidas de cuándo en cuándo las notas de viril jota.

Nosotros mientras tanto, estuvimos recluídos en el pajar, que nos sirve de dormitorio, comentando las excelencias de la cocina y escuchando las ingeniosas donasuras de D. Pío Díaz, de Jaca, que derrochó gracia sin cuento.


Pío Díaz en 1931

(Se trata de Pío Díaz Pradas, el que fuera nombrado alcalde de Jaca durante la sublevación de Fermín Galán y García Hernández, en diciembre de 1930, primer alcalde republicano en España,  posteriormente condenado a cadena perpetua por un juez militar tras el fracaso de la sublevación y amnistiado y nombrado alcalde honorario de todos los pueblos de España con el advenimiento de la II República en 1931)

Después de tomar el café y proveernos de fiambres para el almuerzo, se organizó un magno ojeo que ha sido coronación de esta montería. 

Los resacadores hirieron y persiguen ahora a un jabalí y un corzo. 

El equipo Lapetra-Díaz , cobró un hermosos ejemplar de los primeros. La pareja Puyol-Rey, otro no menos grande. Pero el record de la magnitud lo batieron el conde de Santa Cruz de los Manueles y Antonio Zapater, que hicieron dar pinta-coda (voltereta) a un hermoso jabalí de unas nuevo arrobas, armado de grandes colmillos.

Respecto al conde de Santa Cruz de los Manueles, podría tratarse de Juan Jordán de Urriés y Méndez de Vigo, IX conde de Santa Cruz de los Manueles . Republicanos y monárquicos en armonía, unidos por la caza...

Se han hecho varias instantáneas en los momentos más culminantes de la cacería.

El entusiasmo es indescriptible. Levantado el campamento de Hoza (sic) (Oza) (la Mina) hoy haremos campo de nuestras excursiones en "Borda de Nadal".

El día ha sido de prueba; y el cansancio es en general tan grande como grande es la satisfacción de ver ante La Chavala (???) siete colosales piezas cobradas en dos días.


Cazadores en la Reclusa. Fot. Julio Soler 1910


El éxito todo de la cacería corresponde a nuestros amigos de aquí, y a los voluntariosos e intrépidos resacadores Pío de Siresa, y Mariané, Tomás y Manuel de Hecho.

Día 9.- Hemos hecho un ojeo, que duró 8 horas. Durante él movimos dos grandes manadas de sarrios, que treparon hacia las cumbres nevadas donde no era posible el acceso de los punteros.

Terminado el resaque marchamos a Hecho para salir mañana hacia Zaragoza.

Resumen: 7 jabalíes cobrados, que pesan en junto 327 kilos; más otro jabalí y dos corzos heridos, de los que darán cuenta intrépidos mozos que salieron en su persecución.

La cacería, atractiva, encantadora; pero por encima de todo debe colocarse la amabilidad y las atenciones de estos nobles montañeses.



Aquí acaba el relato. Por lo mencionado, le cogieron gusto a cazar en el Valle, ya que como indico al comienzo, al año siguiente repitieron expedición. No existen imágenes publicadas de la cacería. Todas las que incluyo en el artículo para ilustrarlo, corresponden a otras monterías o lugares. Algunas no creo que fueran muy diferentes a las reales....









2 comentarios:

  1. Interesante, y malos cazadores, matar en tantos días, tan pocas piezas

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    1. Así es. Y lo cazado gracias a los resacadores de lo lugar. Parece que les iba más la gastronomía....

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