EL TENOR MIGUEL FLETA RUEDA SU TERCERA PELICULA EN ECHO

Miguel Fleta caracterizado como contrabandista en la película "Miguelón".

Se dice que,mediante gruesas cuerdas se le bajó al cauce del río en el desfiladero de la Boca del Infierno, donde aprovechando la acústica natural , cantó una jota....

Bajara o no, lo que es cierto es que en el otoño de 1933, el tenor Miguel Fleta, anduvo por los escenarios naturales de Echo, Ansó, Siresa, Embún y Oza rodando como protagonista la que sería su tercera película, titulada "Miguelón, el último contrabandista".

Miguel Fleta

Fechado el 19 de octubre de 1933, un anónimo corresponsal del Diario de Huesca, informa de la presencia en Echo del famoso tenor de Albalate de Cinca, para conocer los escenarios donde comenzará en un par de días el rodaje de la película citada y la localidad donde se iban a rodar las escenas principales.

El mismo diario, un mes después, el 25 de noviembre, publica un artículo sobre la película, de la que dice textualmente estar inspirada en la siguiente copla:

"No son sólo los de Ansó,

los que pasan la canal,

que también pasan los chesos,

                                                  y la güelven a pasar"

El artículo, que es claramente publicitario, ensalza las interpretaciones de Miguel Fleta como actor principal, y de las actrices Matilde Revenga y Luana Alcañiz., así como del joven actor José María Linares Rivas.

Escena de la película. Foto de la Enciclopedia Aragonesa

La película fue rodada en los escenarios naturales del valle de Echo, participando numerosos habitantes del valle como extras, aunque el equipo técnico y los actores se alojaban en el Hotel Mur de Jaca. La obra estaba escrita por Antonio Pérez Soriano, para la empresa Index Film (en la que participaba económicamente también Fleta) .El director era Adolfo Aznar con música de Pablo Luna, ya que Fleta interpretaba 12 números musicales.

La obra relataba las hazañas de un contrabandista de armas durante las guerras carlistas, que no puede tener hijos en su matrimonio. Al quedarse viudo y volver a casarse, no sólo los tiene sino que además deja la mala vida burlando la ley, y se hace más bueno que el pan. Moralina a tope, muy del gusto de la época, como excusa para colar las canciones, que era de lo que se trataba.

Fleta estaba ya en el declive de su carrera. La película fue un estrepitoso fracaso cuando se estrenó en 1934 y de nuevo al siguiente año. No queda ninguna copia de la misma, salvo al parecer en la Argentina.